Cuando Boca manejó el juego, como ocurrió en buena parte del primer tiempo, le faltó fluidez en el traslado del balón, Juan Román Riquelme no encontró compañía y en los últimos metros de cancha fue muy poco lo que se produjo.
Cuando Lanús fue el que mandó en el desarrollo, como pasó en los minutos finales de la etapa inicial y en el comienzo de la segunda parte, no logró aprovechar lo que insinuaba el uruguayo Mario Regueiro, el buen trato de pelota se diluyó al llegar al área y así fue que tampoco halló concreciones.
De todos modos, este 0 a 0 dejó al equipo de Guillermo Barros Schelotto como líder invicto y con dos puntos de ventaja sobre sus escoltas, River Plate y Newell’s Old Boys.
Por su parte, Boca quedó a diez puntos de la cima y está casi afuera de la lucha, pero ya está clasificado para los octavos de final de la Copa Libertadores.
Riquelme, con poco, fue lo más rescatable del pálido empate. El equipo de Carlos Bianchi, que lleva siete partidos sin perder, mejoró algo en su juego, pero sigue en deuda en cuanto a resultados en el torneo Final. Lanús, en tanto, logró lo que quería: hizo negocio con el empate y mantuvo la ventaja en la punta.