Nicolás Blandi, esta vez centrodelantero titular, marcó el único gol del xeneize, que fue de mayor a menor a lo largo del juego, reiteró problemas de contención en la mitad de la cancha y no tuvo solidez en su última línea, pero logró sostener hasta el epílogo la mínima diferencia.
A los 8' se puso en ventaja el equipo local en una jugada en la que Franco Sosa ejecutó un centro pasado, que Blandi llegó para conectar la pelota hacia la red, aunque quedó la sensación que la empujó con la mano. Con el correr de los minutos Boca se fue desdibujando, empezó a dividir el balón, dejó ver algunas fallas en defensa y solo mejoró ocasionalmente con los encuentros Riquelme, Erviti, Juan Manuel Martínez y Clemente Rodríguez por izquierda.
El local tuvo chances para aumentar pero no estuvo preciso en la definición sobre todo Blandi, en dos ocasiones.
El segundo período de Boca fue muy deficitario, en ningún momento tuvo control del juego y permitió que Barcelona creciera. A los 38 llegó la gran polémica: un cierre de Caruzzo sobre Damián Díaz que el árbitro brasileño Marques Ribeiro no sancionó con penal y que Barcelona reclamó airadamente.
Boca podía quedar clasificado hoy si Nacional de Uruguay vence a Toluca en Montevideo, pero para sostener sus ambiciones necesitará del fútbol que por ahora no tiene.