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17 abr 2013

ASEGURA QUE HABÍA SIDO SECUESTRADO


Un adolescente que se hallaba desaparecido desde la mañana del día lunes 16 se presentó en casa de su abuela en la tarde de ayer, donde denunció ante sus familiares haber sido secuestrado en calle Samuel Quevedo al 2.200 de barrio 20 de Junio.
La misteriosa desaparición estuvo sazonada con una pequeña misiva escrita de su puño y letra, encontrada por su madre, de profesión docente, cuyo contenido decía textualmente: “Auxilio, mamá, ayuda”.
La madre del joven estudiante, angustiada, hizo una exposición policial el lunes a la tarde y ante la ausencia del menor durante la noche, en la mañana de ayer recorrió cada uno de los medios de comunicación más importantes de la provincia para solicitar información, ayuda y clemencia a los posibles secuestradores, porque a esa hora las redes sociales hablaban ya de un posible secuestro.
En horas de la tarde una docente que se identificó como Lucía Chávez, compañera de trabajo de la madre del desaparecido, aseguró que el joven había aparecido en horas de la tarde en el domicilio de su abuela, sito en villa María Esther de esta capital. La docente relató que ella misma escuchó el relato del recién aparecido, quien aseguró ante sus familiares que había sido secuestrado el día anterior y que se hallaba sin comer desde entonces. “Al chico se lo veía golpeado en las piernas”, dijo la docente a El Tribuno de forma telefónica.
Anoticiada su madre de la aparición del joven, llamó inmediatamente a la policía, que ya había desplegado un gran operativo de búsqueda, tras la difusión del mensaje dejado por el chico antes de desaparecer.
El adolescente fue conducido inmediatamente hacia el hospital público, donde fue asistido por profesionales de la salud, para luego ser revisado nuevamente por los médicos legales de la policía y por un profesional particular de la familia.
No fue al colegio
El chico desaparecido no concurrió ayer al colegio, donde sus familiares lo esperaban por si acaso el chico hubiera estado en casa de algún compañero o amigo.
Esta ausencia angustió por demás a su madre, quien denunció por todos los medios de comunicación la desaparición del joven, quien finalmente se presentó en casa de su abuela.
La policía trabajó ayer sobre los datos aportados por el muchacho, pero no descarta que se trate de una desaparición voluntaria por problemas de índole familiar.
Por el tema hay secreto en la investigación hasta tanto se diluciden algunas cuestiones que no están esclarecidas, tanto en la denuncia por la desaparición del joven estudiante como tampoco en la historia que éste narró a sus familiares.

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