En las primeras horas del 1º de enero del 2013 en el Hospital Público Materno Infantil recibieron siete ngresos de quemados por pirotecnía, cifra que ha bajado notablemente con la de años anteriores. Pero ahora lo preocupante es que está aumentado los casos de menores alcoholizados. Dos niños de 14 años debieron ser atendidos, uno en coma alcohólico y otro además había consumido marihuana y ansiolíticos.