Las máquinas en las que se imprime la Boleta de Voto Electrónico no tienen ningún tipo de conexión. Solo deben estar enchufadas a la electricidad. "Pero si se registrase un corte de luz, las máquinas tienen autonomía a través de baterías principales y de reserva suficientes para todo el proceso electoral", explicó López Mirau. "Es decir que el proceso electoral tiene múltiples garantías para su normal desarrollo".
Para el momento del escrutinio, se contabilizan las boletas papel que se depositaron en las urnas físicas, al igual que en el sistema tradicional. Por ende, tanto la votación como el escrutinio están asegurados y no pueden ser afectados por ningún corte eléctrico ni de conectividad.
Con respecto a la transmisión instantánea de los resultados, de las 433 escuelas habilitadas, 360 cuentan con conectividad satelital. "Es decir que la transmisión de los resultados no depende de ninguna fibra óptica que se pueda cortar, o sea, el 83% de las escuelas tiene como principal conexión o de contingencia un servicio satelital que es ajeno a las fibras ópticas como la que se rompió ayer", explicó el funcionario, "pero además de las 433 escuelas, 225 tienen doble servicio de conectividad a internet con dos empresas operadoras diferentes. En estos establecimientos educativos se encuentra el 86 % del total de las mesas (2.404 mesas tienen conectividad de contingencia de las 2.770). Las 208 escuelas restantes, en las que funcionarán el 14 % de las mesas, cuentan con el servicio de conectividad satelital. "Esto quiere decir que la transmisión de los resultados de cada mesa, el domingo está garantizado por diferentes variables de conectividad", finalizó López Mirau.
