Tricota ante el santo y suspenso.
El clásico salteño quedó en manos de Central Norte. Los hinchas santos arruinaron la noche.
Los clásicos tienen motivos, emociones y sabores distintos por el clima que se vive y eso lo sabe muy bien Central Norte, donde un equipo que sabe jugar estos tipos de partido, volvió a demostrar buen futbol y ganar ante su acérrimo rival, Juventud Antoniana, que lo tiene de hijo en los clásicos jugados en los últimos años.
En el tercer clásico de la temporada, el cuervo volvió a ganar en setenta y un minutos de partido donde gusto, goleo y dejo a un Juventud en ruinas, donde en las ultimas horas salió la versión de que Iván Delfino dejaría el cargo, porque luego de retirarse del estadio solo atino a decir que “mañana seguiremos hablando” dejando un sensación a despedida, mas allá que salió una oferta del futbol chileno.
Pero el protagonismo de la noche se la llego Hubert Piozzi y sus once jugadores, porque desde un primer momento puso presencia en el terreno de juego, que entendió que la debilidad del santo estaba por la bandas, donde Barbosa, Benítez y la buen futbol que aplico Matías Ceballos en el mediocampo, dejo mas que aciertos, para que Weiner y Noir, quien volvió al gol, le dieran una alegría a todo el pueblo azabache.
El primer grito del azabache fue a los catorce minutos, tras una jugada de Ceballos, centro al corazón del área, en el trayecto entre tanto tumulto, Carlos Fretes mete un taco hacia el medio del arco y en la proyección apareció, Joel Barbosa, que le gano a dos defensores y solo atino a empujarla hacia el fondo de la red y marcar la primera conquista.
Mientras Central jugaba al futbol, en la vereda de enfrente no pasa ni la hora para que reaccionaran, porque se vio un equipo que le falto actitud para salir hacia adelante sabiendo que esto era un clásico, pero las fallas que viene teniendo en defensa dejo otra vez evidenciado que este plantel antoniana esta con muchas fallas y que para remediarlo es demasiado tarde.
Tuvo algunas llegadas esporádicas con Perillo, para colmo casi comete el erro fatal de meter un gol en contra, cuando Matías Domene quiso despejarla y casi convierte en su mismo arco el segundo tanto. Contraataque para la visita con Mario Campos quien gano la pulseada a la defensa de Juventud, centro atrás y Chávez no lo supe aprovechar porque apareció Ortiz para salvar el arco de Pérez.
Sobre los minutos finales, el santo quiso equilibrar un poco el barco pero la mala fortuna por definir también le jugo en contra toda la noche, porque Acosta tuvo la opción de marcar de cabeza, pero la pelota pega en la espalda de Fretes y al córner. Luego en un mal despeje de Martínez, la pelota tomada trayecto hacia el arco de Maino, y como si fuera un juego de vóley, la saco y de espaldas.
Pero la mas clara la tuvo a los cuarenta minutos con Juan Manuel Perillo que en un magnifica jugada, solo atino a levantar el esférico por sobre la humanidad de Maino, pero su tiro pego en el palo derecho. Sobre el final un intento de Saroza por vía del tiro libre pero su remate se fue se cerca del palo.
La etapa complementaria la historia no iba cambiar, porque en un primer momento, Juventud quiso ganar en el juego futbolístico al cuervo, pero los errores del equipo volvieron a dejar evidenciado que estas cuestiones la aprovecha muy bien Central, que llego al segundo gol con una jugada que la inicio Ceballos por medio de un taco, la cedió a Weiner. Este envió un centro pasado para Noir, quien gano el balón, y empalando por encima del uno antoniano, estableciera el dos a cero y la fiesta era todo color negro, cuando iban catorce del complemento.
La liquidación total llego sobre los veintitrés minutos, luego de que Carlos Fretes ejecutara un tiro libre, el gato Pérez dio un rebote largo y el que apareció para empujarla de cabeza es Ceballos, quien conquisto el tercero para el cuervo y la furia completa de los antonianos que decidieron subirse al alambrado, romper butacas y hacer suspender el partido un minutos después del gol, donde el fútbol salteño esta dejando mucho que desear.
Por. José Saltos.
